A los seres nobles y raros

«Cualquiera puede simpatizar con las penas de un amigo; simpatizar con sus éxitos requiere una naturaleza delicadísima. Realmente nada hay en el mundo más noble y raro que una amistad verdadera.»Oscar Wilde

Hoy quería hablar de la lealtad.
Quería hablar de caerse, de pegarse la gran ostia.
Quería hablar de que te levanten, dando igual en qué punto de este enorme planeta te hayas caído.

Hoy quería hablar de los amigos.

Quería hablarte de ese día en el que pensaste que el mundo se estaba deshaciendo bajo tus pies y sonó el teléfono. De aquel “estoy bien, no hace falta que vengas” y el sonido del timbre de tu casa diez minutos después.

Quería hablarte de esa fiesta, de aquella música de fondo mientras brindabas.
De un coche lleno de gente. De gente que llena tu vida.

Quería hablarte de hacerte mayor.
Y de verles hacerse mayores contigo.

Quería hablarte de agarrarte a una boya en medio del mar, durante una tormenta.
De las personas que tú eliges para acompañarte a lo largo del camino.

De irte lejos. Muy lejos. Y que ellos siempre encuentren la manera de ir contigo.
De querer matar a alguien y ser capaz de cortarte un brazo por él al mismo tiempo.
De esa gente que se va contigo a la mierda para que no tengas que ir solo.

Quiero hablarte de ser parte de la familia en una casa que no es la tuya.
De días buenos y malos. Pero todos con ellos.

Quería hablarte de que la opinión de alguien te importe. De dejar que alguien te diga lo que no quieres escuchar. De que te recuerden quién eres cuando a ti se te ha olvidado.

Y de hacer muchos planes. Aunque la mitad nunca lleguen a ocurrir.
Y de que te abracen cuando lo necesitas. Porque todos lo necesitamos.

Y de compartir.
Compartirlo todo.

De pequeños empujones necesarios para hacer las cosas verdaderamente grandes.

Y de que pasen semanas, meses, incluso años, pero que parezca que no ha pasado ni un sólo día desde la última vez.

De hermanos que no llevan la misma sangre.
De los de verdad.
De esos seres nobles y raros.

ECGXIII.

35 thoughts on “A los seres nobles y raros

  1. Por todos ellos y por las (muchas) veces que no sabemos reconocerles su mérito.
    Está bien que de vez en cuando nos paremos a pensar en lo afortunados que somos de poder contar con ellos.

  2. Gatsby, lo has clavado. Enhorabuena, felicidades y, como diría Homer Simpson cuando se imagina que es un mafioso de la Cosa Nostra: «Grazie Tante»

  3. y de esos momentos en los que enfermas y estás en una habitación de hospital y aparecen justo en el momento necesario, cuando más lo necesitas, para acompañarte. He llegado a llorar más por la emoción del » Hola , cómo estás. Te traigo unos bombones y unas revistas. » que no por el dolor físico. Que se reúnan muchos en los buenos momentos es fácil. Que te acompañen en los no tan buenos es lo raro. Efectivamente, lo raro. Pero grande y heroico.

  4. Impresionante y grandioso.
    He reconocido a muchos de mis amigos en las frases, en las situaciones, en los sentimientos.
    Gracias por describir lo que muchos sentimos, aunque no sepamos encontrar las palabras adecuadas para transmitirlo ;D

  5. me parece apasionante este texto, se me han saltado hasta las lágrimas, qué grandiosa puede llegar a ser la amistad cuando se es noble. Me lo guardo para esos momentos de soledad y reflexión, mil gracias por poner palabras a cosas que llevaban mucho tiempo rondando mi cabeza.

    PD: (odio los posdata, que conste, pero no se como hilarlo con lo anterior) me he leído tu blog enterito, ya te pongo hasta voz, por favor escribe pronto, o tómate el tiempo que necesites para escribir, me alegras 🙂 muchas gracias

    1. Qué grande es todo en general cuando se es noble. Y qué grande emocionar a alguien escribiendo. Te lo agradezco.
      Nos vemos pronto por aquí.

  6. Lo siento muchisimo de verdad, ha sido todo un mal entendido. Habría nombrado tu blog y te habría pedido permiso para ponerlo. EN ningun momento he querido copiar ni nada, t ejuro que no sabía que era tuya la entrada.
    Lo siento de verdad.
    Ya he eliminado la entrada y gracias por avisarme de que era tuya, de verdad.

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